02 Sep ¡EL QUE NO ARRIESGA NO GANA!
-¿Qué tan tolerante eres al riesgo?
– ¿Yo?…. (Volteé a ver a mis compañeros pensando en cuál es la mejor respuesta..)
El coach que impartía el taller, sonrió… y me dice… “¿Si, te gusta tomar riesgos?… Mi respuesta inmediata fue “No”… por un momento pensé que deseaba que respondiera que si… pero la realidad es que no me gusta, en ningún ámbito … No me gustan los deportes extremos, ni los juegos de azar, ni siquiera no saber a dónde voy…
-Ok, está bien… es totalmente válido… y ¿a tu Sponsor?
-¿A mi Sponsor?
-Si… ¿a tu Sponsor le gusta tomar riesgos?
-Si, definitivamente si…
-Ok y ¿cómo planeas?… con estrategias de alto riesgo o bajo riesgo… porque quizás tomas decisiones profesionales en base a tu tolerancia al riesgo y no a las de la empresa o lo que tu líder demanda…
¡Wow!, que poderosa reflexión… creo que desde ese momento mi manera de ver las cosas respecto al riesgo cambio totalmente. En Project Mangement, el RIESGO es un área importante para administrar; básicamente se deben considerar todos los posibles escenarios que pudieran representar una amenaza para el proyecto… sin embargo puede haber riesgos positivos… Si… positivos… porque tendemos a pensar que los riesgos son negativos, sin embargo pueden existir riesgos que representen oportunidades de mejora para el proyecto.
Entonces, si el Project Manager está constantemente planeando con una baja tolerancia al riesgo, no solo frena las amenazas si no que también impide oportunidades. Y de igual manera si planea con alta tolerancia al riesgo, es su misma gestión la que amenaza al proyecto. Definitivamente es un tema que requiere análisis, lo más importante es conversar con el Sponsor y saber qué riesgos está dispuesto a tomar y entonces planear desde esta óptica.
Aprender respecto al riesgo en los proyectos me ha ayudado no solo a mejorar mi desempeño profesional, sino a observar comportamientos de las personas que me rodean e incluso los míos. Muchas actitudes van ligadas de acuerdo a la tolerancia al riesgo de las personas. Es cierto que es bueno ser precavido y no arriesgarse… pero también es cierto que…
¡EL QUE NO ARRIESGA NO GANA!
Y tú… ¿Qué tan tolerante eres al riesgo?