¡NO DEJES PARA MAÑANA LO QUE PUEDES APRENDER HOY!

¡NO DEJES PARA MAÑANA LO QUE PUEDES APRENDER HOY!

¡No me alcanzan los días de 24 horas!

 

En una sesión de Coaching, un coachee project manager de uno de los proyectos más importantes de su empresa, me decía: ¡quisiera días de 36 horas, no me alcanzan los de 24! Profundizando en el tema, concluyó que el tiempo es el único recurso que no se puede renovar, no puede regresar al pasado, ni siquiera al minuto anterior y no se puede agregarle minutos al día, ¿cómo entonces hay gente que logra terminar cierto trabajo en tiempo y gente no es capaz de hacerlo?

 

Pongamos un ejemplo, le dije, conozco a una persona que puede llegar tarde al trabajo y a todas las juntas, pero cuando se trata de un viaje de trabajo, siempre llega puntual al aeropuerto, ¿qué hace la diferencia? Veamos alternativas:

 

  1. Puede ser que no haya consecuencias si llega tarde a las juntas y al trabajo y en el aeropuerto corre el riesgo de perder el avión y entonces sí haya consecuencias.
  2. Puede ser que le guste mucho viajar o el lugar que lo motive a estar puntual en el aeropuerto.
  3. Puede ser que tenga el hábito de llegar temprano al aeropuerto porque así lo enseñaron en su casa.

 

Existen diferentes razones por las cuales una persona procrastina, que es el hábito de postergar las acciones y/o las decisiones. Algunas tienen que ver con creencias, patrones de conducta, emociones y motivaciones, otras pueden generarse por inmadurez y en algunas ocasiones lo que hace procrastinar a las personas es el miedo, a no ser capaces de lograrlo, al qué dirán, etc. En proyectos en muchas ocasiones tiene que ver con la falta de un objetivo claro y de definir las prioridades del proyecto en función de esto.

 

Lo primero que puede ayudar para vencer la procrastinación es identificar cuál es la razón para hacerlo, qué beneficios obtienes con eso y qué necesitarías para dejar de hacerlo. Es importante identificar también el motivador para cambiarlo y qué nuevos beneficios traería esto. Ampliar la visión considerando los beneficios en el largo plazo, facilita visualizar los beneficios del cambio y fortalecer la motivación para lograrlo.

 

Otro punto importante es asegurar que se tiene claro el objetivo de lo que se quiere lograr en el proyecto o en el trabajo, es decir, tener visualizado el resultado. Así los esfuerzos en la administración del tiempo y considerando las acciones que se requieran estarán alineados a obtenerlos.

 

Para fortalecer la administración del tiempo, es importante aprender a priorizar, una herramienta que puede ayudar es la matriz de la administración del tiempo del tercer hábito de Stephen Covey y saber decir que no a lo que no es prioritario, es decir, ser asertivo. Desarrollar nuevos hábitos toma tiempo y esfuerzo, en este camino es clave, reconocer los logros conforme se vaya avanzando para mantener la motivación y a retomar el rumbo cuando se presentan los obstáculos.

 

Si eres de los que necesitas días de 36 horas, es momento de aprender técnicas para administrar el tiempo, ¡no dejes para mañana lo que puedes aprender hoy!